Una estrella en la tierra y otra en el cielo.

Hoy es viernes y los sueños brillan más...

Norma Jeane Mortenson nacía en 1926, en Los Angeles, para comenzar una infancia llena de idas y venidas de casa en casa, de familia en familia buscando la felicidad que su madre, Gladys Pearl Baker no podía darle, por causa de la enfermedad mental que padecía. Con 16 años y harta de no encontrar la estabilidad, se casa con un amigo de la familia, pero cuando su marido se va a la marina llamado por el ejercito de los Estados Unidos , Norma se queda en casa de su suegra y empieza a trabajar en una fabrica de munición.

A los 18 años, el fotógrafo Henrik Manukyan le ofrece trabajar como modelo, posando junto a su suegra en la fabrica dónde trabajaban. A su marido no le gustaba mucho ésto de las fotografías y Marilyn tuvo que escoger entre su nuevo trabajo o su marido y su vida de ama de casa. A consecuencia de ésto, se separa de James Dougherty en 1946.

 Y aquí empieza MARILYN MONROE.

Ése mismo año es contratada para hacer de extra de cine durante seis meses en la Twentieth Century Fox. En 1950, después de algunos papeles en películas que no tuvieron muy buenas criticas, rueda La jungla de asfalto y Eva al desnudo, donde por fin los críticos valoran su trabajo.
En diciembre de 1953 aparece en la portada del número inaugural de Playboy, siendo la primera chica del mes de la historia de la mítica revista, con la famosa fotografía "Sueños dorados" donde se podía admirar sus 94-58-92.

 También hace la famosisima película "Los caballeros las prefieren rubias" donde canta la canción "Diamonds Are a Girl's Best Friends", después vendrían "Cómo casarse con un millonario", "Río sin retorno", "Luces de candilejas", y la entrañable "La tentación vive arriba". En el 56, con la película "Bus stop" llegó su reconocimiento como actriz.

 

Llega su momento más dulce cuando en Junio de ese mismo año se casa con Arthur Miller y le dura muy poco la felicidad, porque después se va a Londres a rodar "El príncipe y la corista" con  Laurence Olivier quien también es el director y en el rodaje sufre un aborto. Es en ésta película también cuando se vuelve alcohólica y adicta a los barbitúricos. 

 La tortuosa vida de Marilyn comienza. Mientras trabaja en la peli "Con faldas y a lo loco", Marilyn llega tarde a los rodajes, repetía las tomas una y otra vez, y no consigue memorizar sus diálogos, mientras sus compañeros tienen que sufrir las consecuencias y se tiene que enfrentar a otro nuevo aborto.

Durante éste tiempo comienza a derrumbarse y las visitas y las llamadas a su psiquitra el Dr. Ralph Greenson son constantes. Marilyn padece insomnio y toma demasiadas pastillas.

Durante la grabación de la película "Vidas rebeldes" la actriz que falta con frecuencia al rodaje, tiene que ser ingresada durante diez días en un hospital. Ésto termino con su matrimonio con Miller.

Después de ésto durante la grabación de la película "Something's Got to Give"  la actriz siempre está enferma con sinusitis y bronquitis. Es invitada a participar en la fiesta de cumpleaños del presidente  para cantarle el cumpleaños feliz. Para acudir a la cita, Marilyn falta al rodaje durante siete días. Cuando volvió al rodaje de la película, fue despedida, aunque tuvieron que readmitirla cuando otra actriz se negó a sustituirla.

En Junio de ese año, hace la última sesión de fotos de su vida. Las fotos son tomadas por Bert Stern y se habían hecho para la revista Vogue.

Marilyn muere el 5 de Agosto de 1962 por una sobredosis de barbitúricos. Dicen que se suicidó. Dicen que la envenenaron. ¿Qué importa? La estrella, la más hermosa, la inalcanzable Marilyn desapareció como una mujer cualquiera. En su cama. Sola. Lo tenía todo, pero no tenía a nadie. Su psiquiatra Hyman Engelberg, dice que al día siguiente de la muerte de Marilyn recibió multitud de llamadas de mujeres diciendo que si hubieran sabido que la actriz estaba mal hubieran hecho lo posible por ayudarla.

Está claro que nunca consiguió encontrar lo que buscaba. La felicidad. Una vez leí en la portada de una revista en dónde ella aparecía flamante una frase que dijo, que no olvidaré jamás, por desgarradora: "Sonrío, pero mis ojos están muertos."

Era tan grande como inestable, tan bella como insegura, tan arrebatadora como frágil. Adoro a Marilyn. El domingo hace 50 años que su vida terminó, como una colilla estampada en el suelo y jamás habrá una mujer que explote tanto su belleza natural como ella, aunque lo pagara con su vida.

Adios Marilyn, espero que nos veamos algún dia.

Buen finde.

Manoleritina.

Mila.